¿Puedes oírme?
Leer, pensar o soñar me dan vida.
Con frecuencia me llaman la voz interior.
Ahora, ¿me oyes bien?
Quiero invitarte a participar en la conversación íntima más importante de tu vida.
Si me lo permites, te abriré la senda que te permitirá descubrir tu capacidad para florecer y tener una vida plena.
También te guiaré para que puedas amarte intensamente.
Te mostraré cómo nunca volverás a sentir soledad.
Ven conmigo.
Date permiso para darle rienda suelta a tu imaginación.
No hay ninguna razón para preocuparse.
Al fin y al cabo, nadie será capaz de oírnos.
Leer, pensar o soñar me dan vida.
Con frecuencia me llaman la voz interior.
Ahora, ¿me oyes bien?
Quiero invitarte a participar en la conversación íntima más importante de tu vida.
Si me lo permites, te abriré la senda que te permitirá descubrir tu capacidad para florecer y tener una vida plena.
También te guiaré para que puedas amarte intensamente.
Te mostraré cómo nunca volverás a sentir soledad.
Ven conmigo.
Date permiso para darle rienda suelta a tu imaginación.
No hay ninguna razón para preocuparse.
Al fin y al cabo, nadie será capaz de oírnos.